Caracas en el alma y el cuerpo, una historia urbana.

Luis Eduardo García Damiani,es alumno del curso de Comunicación Visual en el IDD Instituto de Diseño Darías, Caracas, Venezuela, donde el año pasado tuve la oportunidad de dictarle un taller de Caligrafía Itálica fundamental durante dos días, a pesar de la cortedad del tiempo tuvimos valiosos intercambios y trabajo intenso en el aula, experimentando con marcadores de caligrafía ARTLINE 04 y abundante papel Bond A4, el grupo era muy coherente en habilidades y se mostraron muy motivados en el difícil entrenamiento de las técnicas caligráficas, alfabetos, ductus, escala, proporción, equilibrio, contraste y expresión fueron los puntos básicos tratados.
De regreso en Lima, Perú recibo un mail de Luis solicitándome una frase caligrafiada con el título “Caracas” tenía el firme propósito de hacerse un tatuaje en el cuerpo, caligrafié los siete primeros sketchs y Luis escogió la propuesta más adecuada a su gusto.
A continuación el alumno Luis García nos relata su experiencia personal y mi contribución en este proyecto.

“Mi motivación para tatuarme en especifico fue que siempre había querido llevar conmigo de alguna u otra forma a mi ciudad natal CARACAS, Porque caracas? Porque aquí nací, crecí y gracias a esta ciudad loca, donde cualquier cosa puede pasar, es lo que me ha hecho ser quien soy actualmente…”
El taller de tipografía fue una experiencia única y nueva para mí, nunca había conocido a un calígrafo como Jaime de Albarracín, que personalmente me hubiera dictado un taller con respecto al tema.
Yo en lo personal nunca había escuchado de este calígrafo y diseñador, y en lo que vi la magia que fluye por trazos, me dije: Que va, yo le tengo que pedir a Jaime que me caligrafíe el “CARACAS” ya!
Aparte un amigo de toda la vida llamado Andrés Pojan estaba empezando a tatuar y quien mejor que él, que conoce y vivió la misma historia en esta ciudad. El tenía que hacerlo!
Jaime es un diseñador que vivió en Maracaibo, Venezuela, fue uno de los principales diseñadores de aquella época.
Para mí es un honor y un placer llevar esta pieza en mi piel para toda la vida. Gracias Jaime y Andrés.